LAS CETONAS DE FRAMBRUESA

“un quemagrasas revolucionario, el superalimento para perder peso”… Estos y muchos más son los apelativos que las cetonas de frambuesa se han ganado desde hace un tiempo.

Pero, ¿Qué son las Cetonas de Frambuesa?

Lo último en causar sensación entre quienes desean soltar lastre todo lo deprisa que sea posible es un compuesto aromático integrado por compuestos fenólicos naturales responsables del encantador olor a la frambuesa y que, todo apunta a que ayuda en el proceso de perder peso, según recientes estudios.

¿Cómo lo hace? A través de la producción de adiponectina (una hormona proteica moduladora de una serie de procesos metabólicos, que incluyen la regulación de la glucosa y el catabolismo de ácidos grasos).

En contraposición al delicioso fruto que le da nombre, y que crece en una planta silvestre, las cetonas de frambuesa son creadas en laboratorio, preferentemente en forma de cápsulas, debido a sus altos costes y a las pocas existencias. Se encuentra de forma natural en las frambuesas y en otras bayas

¿Cuáles son sus efectos para el organismo?

Para explicarlos, partimos de la base de que niveles más elevados de adiponectina han demostrado atributos suficientes para controlar algunas de las alteraciones metabólicas. Estas pueden resultar de la obesidad, arteriosclerosis, diabetes, síndrome metabólico y enfermedad del hígado graso.

Por su parte, la cetona de frambuesa desencadena una liberación de la hormona del estrés o norepinefrina, que a su vez produce un efecto termogénico. Ello da lugar a la liberación de glucosa a partir de las reservas de energía, aumentando la descomposición de los triglicéridos en ácidos grasos libres. Una vez este proceso se completa, la lipasa se responsabiliza de romper la grasa para que sea digerida por el intestino.

Y así es como la cetona de frambuesa suprime el apetito y provoca un incremento del metabolismo basal.

 

Así es como se entiende que las cetonas de frambuesa se relacionen con el aumento de la lipólisis o descomposición de células grasas. Este efecto ha sido el detonante del ascenso meteórico de su popularidad entre atletas y culturistas que buscan reducir la grasa corporal y aumentar la definición.

 

¿De verdad ‘derrite la grasa’?

Sí. Ahora bien, de la misma forma que las “dietas milagro” no existen, tampoco es lógico que veas a la cetona de frambuesa como una píldora mágica que hará descender día tras día la cifra que marque tu báscula, como por encantamiento.

 

El compuesto natural responsable del delicioso aroma de las frambuesas requiere de “buena compañía” para realizar el correspondiente despliegue de medios beneficiosos como una dieta que incluya hidratos de carbono con bajo índice glucémico, aumento del consumo de proteínas e inclusión de cantidades moderadas de grasas saludables, por ejemplo, en forma de aceite de oliva virgen, de aceite de pescado o de aceite de nuez de macadamia. Y siempre con la cautela de mantener las calorías bajo la base de las necesidades metabólicas. En este contexto es en el que podemos afirmar que “derriten la grasa”.

 

Conoce sus beneficios, ¡son más de los que esperas!

No te quedes solo con el concepto de cetona de frambuesa para perder peso, pues los beneficios que este compuesto está capacitado para ofrecer a tu organismo van mucho más allá.

Ayuda en las dietas de adelgazamiento

Reduce el apetito

Acelera el metabolismo

Muestra acción termogénica en el organismo, que apoya la quema de grasas

Es un poderoso antioxidante

Incrementa la elasticidad de la piel

 

¿Tienen efectos secundarios?

Antes de entrar en materia, cabe hacer una breve reseña al hecho de que la cetona, al aumentar el metabolismo de las grasas y producir termogénesis, cuenta con propiedades capaces de causar un aumento de la tensión arterial y estimular el sistema nervioso. Esto se traduce en una serie de efectos secundarios, como por ejemplo:

 

Puede aumentar la tensión arterial

Causar taquicardia o aumentar el ritmo cardíaco

Y también nerviosismo

 

En consonancia con sus efectos secundarios, no debes tomar cetona de frambuesa si padeces:

Hipertensión, en la medida que puede aumentar la tensión arterial

Ansiedad, dado que puede empeorar los síntomas de nerviosismo

Depresión pues, sumada a los efectos de los antidepresivos, podría causar una situación de euforia

Taquicardia, debido a que puede aumentar el ritmo cardíaco

Insomnio, aunque lo cierto es que se recomienda tomar cetona por las mañanas, por la posibilidad de que cause nerviosismo que termine afectando al sueño

Problemas de corazón, con el fin de evitar que pueda influir en el ritmo cardíaco, recomendándose en estos casos la búsqueda de alternativas para no incurrir en posibles complicaciones

¿Y qué pasa con las mujeres embarazadas o en período de lactancia? Pues que no existen estudios que acrediten la absoluta seguridad de este suplemento durante esas etapas, por lo que no se aconseja su toma.

 

En Laboratorios Nale, hemos desarrollado el producto a base de cetonas de frambuesa, Q-GRASS KETON, que seguramente cumplirá todas tus necesidades en este campo, complemento que incluye además de las mencionadas cetonas de frambuesa, el extracto de naranja amarga muy beneficioso en la pérdida de grasa debido a que facilita la termogénesis ( transformación del exceso de calorías en calor) y la pérdida de grasa manteniendo la masa muscular, complementado con Coleus Forskohlii, Levadura de arroz rojo y Te verde, multiplicando los múltiples beneficios de esta fórmula.

 

En resumen…

El origen natural y los escasos efectos secundarios de las cetonas de frambuesa hacen de él un producto seguro para quienes deseen experimentar los beneficios de la reducción de grasa potencial de este demandado suplemento.